La acupuntura celestial
nos va aplicando cada día,
sus agujetas de energía
en cada vértice esencial…
Su delicada vibración
-hecha con luz de las estrellas-,
quita el pesar de nuestras huellas,
y nos alivia el corazón…
Y con su toque redentor,
va removiendo suavemente
las impurezas de la mente,
y los estigmas del dolor…
De esa manera el Sol Central,
nos va licuando las creencias,
y las antiguas adherencias
de un viejo mundo fantasmal…
Con el fotónico masaje
de su caricia vibratoria,
va aligerando, en nuestra historia,
la densidad del equipaje…
Y resucita la inocencia
de un ancestral saber innato,
que nos revela a cada rato
¡que somos dioses en potencia!
(¿Puede haber algo más genial
que recibir cada jornada,
una sesión tornasolada
de acupuntura celestial…?)
Jorge
8 comentarios:
Hola Jorge,es cierto,no hay nada más genial...
pero genial,también me parece el paralelismo que desarrollaste en este poema.
Nos ayudás a tomar conciencia,sobre el proceso y al mismo tiempo,a activarlo,a acelerarlo...donde
está la atención,se potencia.
Hermoso!!!!
¡Que esas "agujetas de energía" activen aún más cada jornada, tu delicada y sutil vibración, mi bella amiga...!
bella poesia como todas las otras
feliz navidad
¡Gracias, amigo/a!
¡Felices fiestas también para ti!
Un gran abrazo...
(¿Puede haber algo más genial
que recibir cada jornada,
una sesión tornasolada
de acupuntura celestial…?)
ahhh que belleza, hermosa sensacion de paz en el fluir de tus versos..
gracias..graciass por regalarme este momento amigo...
sigue llevando tus agujitas de sabiduria a mas corazones.
un abrazo de luz.
¡Ojalá que esa "hermosa sensación de paz...", corretee cantarina en todos los momentos de tu vida, preciosa Merly...!
Un gran abrazo...
Hermosas redondillas, seguro que esa acupuntura saben como caricias en el alma, igual que estos bellos versos.
Gracias, Jesús...por tu visita y por tu cálido mensaje!
¡Lo mejor para ti!
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